21/11/2013

Aprovechando el día de hoy a 21 de noviembre de 2016. 

Tal día como hoy, mis compañeras, mi profesora, su marido Antonio y yo, emprendíamos un viaje rumbo a Barcelona, a un congreso en el cual la revista del instituto estaba nominada,  un premio que dejaría al centro en un punto muy alto, no ganamos, pero aún así lo sigue siendo. 

Ilusionados y con ganas de llegar a la ciudad, cualquier cosa que veíamos era una maravilla. Era mi primera salida sin padres, el viaje de mi vida. Dedicábamos una parte de la mañana a escuchar a los otros centros que como el nuestro estaba nominado. Mis compañeras junto a mi profesora, la que tanto empeño puso y pone, realizaron una exposición sobre los artículos que incluíamos en la revista, entrevistas, y visitas a otros lugares.

Antonio planeó una visita por toda la ciudad y no dejó un lugar olvidado, nos enseñó cada rincón que Barcelona escondía, mientras nos regalaba cucuruchos de tacos de jamón y un separador de libros de la Sagrada Familia. María Antonia y el nos contaban secretos de la ciudad.

Pero sobre todo, nos contaron una historia de amor que quedará escrita en la eternidad. Su gran historia, el encuentro de sus destinos. Como se conocieron...

Por desgracia la historia de amor puso un punto y aparte. Antonio nos dejó y fue una triste pérdida. Después de que una enfermedad hiciera estragos. Es verdad eso de que hay personas que conoces y marcan un recuerdo rápido en tu vida. Es inevitable no acordarse de Antonio, cuando vuelves al viaje y lo ves llenándose la boca de palabras bonitas cuando hablaba de María Antonia. Cuando se sentó a mi lado en el restaurante y me contó anécdotas de su vida mientras me pedía que le fotografiase tomando vino. 

Es tan delicado el recuerdo que podría acordarme de cada detalle. Cuando Noemí y yo por las noches huíamos en ascensor recorriendo las habitaciones de la residencia, o cuando grabamos en secreto a  Elena. O cuando María Antonia escribía a cada hora lo que estábamos haciendo en ese momento. Tan delicado es el recuerdo que podría escuchar de fondo las canciones que el espectáculo de las Fuentes del Montjuic nos regaló. De primer plato nos pusieron la canción de "STRONGER"  de Kelly clarckson, de segundo plato nos pusieron "SOTA UNA ESTRELLA" de Pulseras Rojas, y de postre "ELS TEUS SOMNIS" también de la serie Pulseras Rojas. Aquella noche recuerdo que anduvimos horas desde el Camp Nou hasta las fuentes. Y estábamos cansadas y cenamos en un sitio cercano a la parada del metro. María Antonia nos dio tantos consejos para sobrevivir que nunca pude agradecérselo como debía. Aquel viaje marcó un antes y un después. Llenó mi vida de sentimientos, de detalles ocultos, de palabras bonitas, de consejos y una historia tan bonita y dura como es la vida. 

Supongo que siempre hay que estar receptivo para los nuevos acontecimientos que el destino nos tiene preparado, pero vivo aferrada a aquel recuerdo y ojalá Antonio estuviera aquí, para que aquel plan que cuando estaba malito hicimos, pudiera cumplirse. 

Gracias, muchas gracias. Por hacer magia en todo momento, por la seguridad y el viaje que me regalasteis, por todo, por ser un trozo de mi vida.