Agradecí tanto que te quedaras cuando nadie mas lo hizo, cuando decidiste huir de tu vida para venir a abrazarme cada noche cuando te necesitaba. Cuando hacías de ventana para que pudiera respirar, cuando me mirabas y paraba el tiempo. Agradecí cada mensaje de buenos días y preocupación cuando las nubes invadían mis recuerdos. Cuando no quería salir y preparabas un camino de luz para que no me sintiera sola. Pero cerraste la ventana y me volví a quedar sola. Nos separaba un inmenso cielo azul y no podía conseguir traerte de vuelta.

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