Siento haberme ido así, sin recordarte por última vez que valoraba cada consejo, cada paso que decidías dar por mí. Siento haberme ido así, sin decirte te quiero una vez más, sin abrazar tus abrazos, sin devolverte una mirada de complicidad. Sin escuchar tus buenos días aunque no los dijeras. Siento haberme ido así, sin sonreírte antes de salir de casa, sin tomar nota de tu repetido "ten cuidado".
Siento haberme ido así, pero tengo grabado el eco de tu nombre sobre tu recuerdo, cuando las noches me piden tus abrazos y mis días necesitan tu ayuda.
Me haces falta, claro que me haces falta, pero se nos olvidó que noviembre llega y las noches son frías y amigas de la soledad.
Siento quedarme y no tenerte conmigo, pero cada día que pasa, recreo tu sonrisa para superar cada miedo.
Nunca dejes de escribir
ResponderEliminar